Los amantes de las reformas van a disfrutar con los siguientes ejemplos donde, básicamente, se ha hecho un auténtico lavado de cara a los interiores.
Las casas más antiguas requieren un lavado de cara para mostrar otra imagen más vistosa. En lugar de seguir viviendo en un lugar anticuado y desfasado, ¿por qué no realizar una reforma que cambie la estética interior y renueve toda la decoración? Para extraer una idea más clara de todo esto, queremos mostrarte algunos ejemplos del antes y después tras realizarse las reformas en casa.
El hecho de comprobar las diferencias existentes entre el antes y el después puede resultar divertido; por eso, esta selección de imágenes de los distintos procesos de reforma nos anima a dar el paso en nuestra propia casa. Cocinas anticuadas, dormitorios pequeños, salones oscuros, jardines que eran un caos, etc. Todo se merece una segunda oportunidad y, para ello, nada mejor como rejuvenecer los espacios.
LA REFORMA DEL HOGAR, ¿POR QUÉ HACERLA?
Las reformas de la casa implica un tiempo de paciencia y esfuerzo. En realidad, queremos que luzca como si fuera nueva, algo que puede suponer un cambio de los interiores y aportar nuevos conceptos estéticos que supongan, a su vez, un cambio en nuestra vida. Al fin y al cabo, un piso reformado puede convertirse en algo nuevo que estimule los sentidos y proporcione mayor confort.
Antes de la reforma, debemos conocer qué recursos y materiales deben ser modificados. A partir de ahí, procedemos de mandera directa en todo aquello que se encontraba en mal estado o anticuado. Los suelos, los muebles, la encimera de la cocina, etc. De este modo, vamos a mejorar la imagen y nuestra autoestima.
El mero hecho de tener una casa confortable y agradable nos levanta el ánimo; de hecho, está comprobado que si conseguimos el máximo confort en casa podemos ser más felices. Así que unas pequeñas reformas pueden suponer una solución a nuestras vidas.
EL ANTES Y EL DESPUÉS
Cuando vemos las fotos de las reformas nos damos cuenta que la casa antes no tenía elegancia y había perdido vivacidad, colorido y confort. En cambio, cuando vemos las fotos del después, comprobamos el buen trabajo realizado y la necesidad que teníamos de intervenir en los espacios interiores y conseguir, por ejemplo, un moderno salón o una habitación juvenil.
No importa dónde trabajemos, si es el salón, el dormitorio o el jardín. Cuando una casa se encuentra en mal estado, es conveniente hacer un ejercicio profundo para modificar y cambiar todos los espacios, incluso si es un piso pequeño reformado. Para ello, nada mejor como aplicar nuevos suelos, pintar las paredes, poner otros muebles y buscar mayor eficiencia y amplitud en el espacio.
En definitiva, te invitamos a que eches un vistazo a toda la galería de imágenes que hemos preparado. Son el antes y el después de una cocina, un salón, un dormitorio, etc. Podrás comprobar las necesidades que había de restaurar algunas zonas, reconstituir ciertas partes y reformar los interiores de una manera efectiva, personal y acondicionada a nuestras necesidades.
Antes
Un ático anticuado respecto a la distribución y materiales. Los muebles habían perdido el color natural, las paredes de cerámica están desfasadas y el espacio es amplio como para realizar una reforma en condiciones.
Despues
Ahora es una vivienda fresca, luminosa y actual. El blanco predomina para ganar en luminosidad, se ha mejorado la zona para el día a día y la barra es funcional y sencilla. En el fondo, las reformas en la cocina son necesarias cuando esta se encuentra obsoleta.
Hay mas. Mirá…
ANTES
Los tonos marrones no son una buena idea cuando no tienes mucha luz. Este se puede considerar un ejemplo de lo que no hay que hacer.
DESPUÉS
El blanco ha actualizado y aligerado visualmente esta cocina, de tal manera que queda todo mucho más moderno, luminoso y elegante.
ANTES
Una cosa es que te guste el estilo rústico y otra enterrarte en vida entre madera. A fin y al cabo, parece más una cabaña que una vivienda.
DESPUÉS
¡Así, sí! Ligero, natural y con encanto rural. Dan ganas de dejarlo todo para irse a vivir al campo. Se combinan tonos cálidos y terrosos con el blanco, mientras que la luz natural juega un papel importante en todo el espacio.
Fuente: Argoot Argentina
